Si un ingeniero se va de repente de una empresa, ¿cuántas horas le llevará al equipo de ingeniería tomar el control completo de sus proyectos, con la confianza de que han comprendido no solo los diseños, sino por qué esos diseños son como son?

 

La respuesta típica es "demasiado tiempo". El extenso uso de herramientas CAE y de gestión de datos han hecho que esta tarea sea mucho más fácil que antes, pero estas herramientas hacen muy poco registro del pensamiento que se realizó para llegar a los resultados. En las primeras etapas del proceso de diseño, particularmente, los primeros cálculos "garabateados" son a menudo críticos para determinar la aproximación de diseño y gestionar los parámetros del diseño. Sin embargo, este análisis raramente es presevado con los diseños reales. Como resultado, mucho de este conocimiento sobre el diseño se pierde. Las asunciones clave se olvidan, las elecciones basadas en factores que han cambiado desde entonces no son reconsideradas, las condiciones para la reutilización apropiada de elementos de diseño no son claras. Al no preservar el conocimiento técnico que iba con el diseño, la organización no solo pierde tiempo reaprendiendo lo que una vez fue conocido, sino que también pierde la capacidad de identificar oportunidades para mejoras cuando las asunciones originales cambian. Esto también supone grandes riesgos de costosos errores cuando el diseño es aplicado inapropiadamente en situaciones para las que no es adecuado.

Lea el artículo completo de Paul Gossens, VP de soluciones de ingeniería de Maplesoft